Una odisea cósmica ... de cómic

     




   Vuelvo al mundo de la viñeta para recuperar una pequeña joya de serie publicada allá por los años ochenta, y reeditada varias veces hasta la actualidad. Posiblemente la casualidad ha hecho que cayeran en mis manos unos números perdidos de la serie Dreadstar, publicada en España durante aquellos años y de la que guardo un gran recuerdo, de modo que, puestos a escribir de cómic, ¿por que no aprovechar y hablar de ella, de sus orígenes, autor, etc?.




   Pues bien, comenzamos por su autor, Jim Starlin, dibujante y, sobre todo guionista y creador, nacido en Detroit en 1949. Comienza a trabajar en Marvel en los años setenta, encargándose de varias colecciones, entre ellas Iron Man, donde introduce una de sus principales creaciones, el villano Thanos, tan de moda últimamente en el universo cinematográfico. Posteriormente se encarga de dos series, cuya temática ha demostrado que domina a la perfección, el universo cósmico de la editorial, y con dos personajes clave dentro de dicho universo, el Capitán Marvel y Adam Warlock. Con el primero, creo en 1982, la primera novela gráfica de la editorial, La muerte del Capitán Marvel, antológico y magistral tomo, cuya calidad permanece hasta la actualidad. Es en esta década, en los ochenta, cuando dentro de la línea editorial Epic, fundada por el editor Jim Shooter, crea un personaje del cual obtiene los derechos, Vanth Dreadstar, dentro de una mini serie llamada La odisea de la metamorfosis. Esta dio paso a otras dos mini series, y finalmente a una serie regular, publicada primero por Epic Marvel, y posteriormente por First Comics.





     También colaboró con DC Comics en la célebre mini serie de Batman, Una muerte en la familia, donde fallece Robin debido a una votación popular hecha por los lectores, habría que aclarar, que el que fallece es Jason Todd, segundo Robin, que años después resucitaría, para convertirse en el antihéroe Capucha Roja. También para Batman escribió, Batman: The Cult y Las diez noches de la bestia.

     Después de esto vuelve a Marvel, y recupera sus historias cósmicas, con Thanos, Warlock y muchos de los personajes con los que ya había trabajado anteriormente, escribiendo historias como El guantelete del infinito, Warlock y la guardia del infinito y La guerra del infinito (sí, en lo que se van a basar la mayoría de las películas de Marvel, a partir de ahora).

     Ya en este siglo, se destacaría Marvel: el fin, una historia, trágica y cósmica, sobre el fin del Universo Marvel, protagonizada por…¿adivináis?…Thanos.





     Vamos ahora con la obra en cuestión. En 1980, Jim Shooter, como nuevo editor de Marvel, propone la creación de una línea editorial, encabezada por una revista llamada Epic Illustrated, donde diversos autores, crearían nuevas historias, conservando los derechos de cada creación. En una de ellas, llamada La odisea de la metarmofosis, Starlin crea una historia de ciencia ficción, una auténtica space ópera, llena de magia y tecnología, pero aunque suene extraño, con bastante realismo y oscuridad, en la que, un ser conocido como Aknaton, inspirado claramente en la mitología egipcia, lucha contra una raza muy poderosa llamada Los Zygoteanos, cuyo objetivo es destruir, todas las civilizaciones que encuentren a su paso. Para detenerlos cuenta con artefactos como el cuerno del infinito y, una espada de fuego helado, que él mismo crea, y deja en un planeta a la espera de que el ser adecuado, la recoja.




     Ese resulta ser, el humano Vanth Dreadstar, que en cuanto toma contacto con la espada, la asimila dentro de él, aumentando su fuerza y sus habilidades, y pudiendo convocarla a voluntad, con lo que puede absorber cualquier energía que le lancen, y devolverla con la misma espada, además de usarla como tal y de que esta, le proporcione la inmortalidad. Las circunstancias provocan, que se reúna con Aknaton, y otra serie de aliados, para que finalmente, entre todos, acaben destruyendo a los Zygoteanos, pero pagando el precio de destruir a la vez, a toda la Vía Láctea.




     Después de esta mini serie, siguieron otros especiales en la misma revista, como The price, donde se cuenta, como Dreadstar sobrevive, y lo que le ocurre a continuación, y el origen de algunos personajes, como Syzigy Darklok y el hombre gato Oedi, intentado resumirlo lo más posible, Dreadstar es encontrado en un planeta perteneciente a la Galaxia Empírica, donde dos facciones llevan luchando una guerra de más de doscientos años, La Monarquía y La Iglesia de la Instrumentalidad. El protagonista, aunque en un principio se aparta de la lucha, y pretende llevar una vida en paz, es obligado por las circunstancias, a tomar parte en el conflicto, en un principio por venganza contra La Monarquía, y posteriormente, contra los dos imperios a la vez.

     A esto le siguieron varias mini series, hasta que empezó a publicarse como serie regular. En esta, la historia sería tal y como hemos dicho, la lucha de Dreadstar, contra los dos grandes imperios galácticos, y especialmente contra su gran enemigo, el líder de la iglesia, el poderoso Señor Papal. La serie continuaría publicada por Marvel, dentro de su sello Epic, y más tarde, Starlin la llevaría a First Comic, para evitar su desaparición.



     A modo de reseña, en mi opinión, estoy hablando de posiblemente de la mejor serie regular, del género de ciencia ficción, contándonos una historia con un cierto regusto a Star Wars y sagas parecidas, pero de un modo mucho más adulto, oscuro y crudo. Si en la famosa saga de Lucas, tenemos muy claro quienes son los buenos y quienes los malos, en el Universo de Dreadstar, prácticamente no te puedes fiar de nadie, y nadie es lo que parece, ni se sabe como evolucionará cualquier personaje y hacia que lado lo hará. Además, nos encontramos con una historia muy bien hilada, y muy regular en cuanto a ritmo y trama. Prácticamente Starlin es el único autor, ya que escribe, dibuja y entinta, e incluso, a la hora de colorear, le encarga el trabajo a su propia pareja, por lo cual estamos hablando de que Dreadstar, es una auténtica obra de autor, y completamente recomendable, incluso a día de hoy, es un cómic al que no le ha afectado negativamente el paso de los años. 

     Para finalizar, comentaros el rumor, de que posiblemente, toda esta historia sea adaptada en una futura serie de televisión por cable. Esperemos que respeten el original, y si es así, que la estrenen cuanto antes.


     Un frikisaludo.

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